Cuando los padres comienzan a considerar la posibilidad de solicitar el divorcio, es posible que se preocupen principalmente por el impacto que tendrá en sus hijos. Sin embargo, es posible que puedan abordar la cuestión de una manera menos perturbadora. Lo primero que los padres deben hacer es considerar el momento oportuno para comenzar con el proceso de divorcio. Algunos padres solicitan el divorcio durante el año escolar cuando pueden reunirse con sus abogados mientras sus hijos están en clase. Otros suelen elegir el verano cuando tienen más tiempo para pasar con sus hijos.
Si es posible, ambos padres deben estar presentes en la conversación en la que se les dice a sus hijos acerca de la presentación de la demanda de divorcio. Los niños podrían necesitar consejería, y los padres deberían pensar en cómo pueden responder sus preguntas de una manera que sea menos probable que altere el sentido de seguridad de los niños. Los padres deben asegurarse de que sus hijos sepan que son amados. No deben pelear delante de ellos y deben hablar positivamente sobre el otro padre.
Es posible que los padres necesiten tener una custodia temporal y órdenes de manutención, o que puedan permanecer bajo un mismo techo. Otra opción para los padres es dejar que los niños permanezcan en el hogar mientras ellos alternan el tiempo que viven allí. Esto puede ser parte de un proceso de divorcio colaborativo que permite a los padres cooperar en lugar de tomar el enfoque más contradictorio del litigio.
En algunos casos, los padres pueden no ser capaces de cooperar en asuntos relacionados con el divorcio y la custodia de los hijos. Incluso cuando éste es el caso, deben poner en primer lugar el interés superior del niño, tal como lo haría un juez. Esto significa que incluso si los padres están en un gran conflicto, deben permitir que el otro padre comparta la custodia o las visitas a menos que haya problemas como el abuso. Para obtener más información, programe una consulta con nuestros abogados de divorcio en Miami hoy mismo!